Los morteros pueden dosificarse por peso o por volumen, debiéndose conciliar una gran cantidad de factores que hacen verdaderamente imposible definir un método de diseño de mezclas con validez universal, ya que si el método proviene de datos estadísticos generados con mezclas de ensaye, no existe ninguna garantía de que los materiales usados en dichos ensayos sean similares a los que el usuario del método tendrá a su alcance. Por otro lado los métodos eminentemente teóricos tampoco son aplicables pues carecen de validez real. Lo más aconsejable es generar mezclas representativas por medio de ensayes de laboratorio, para esto se deben emplear los materiales disponibles pero adecuados para el trabajo, también se debe tratar de simular las condiciones ambientales que regirán en la obra, y finalmente, se deben realizar los ajustes de campo necesarios para controlar la calidad del producto final.
Algunos principios fundamentales en la dosificación de morteros incluyen lo siguiente:
• Morteros con altos consumos de cemento generan altas resistencias pero también pueden
agrietarse excesivamente durante el secado. Este tipo de morteros fraguan muy rápido, son
muy densos, durables e impermeables y poseen una gran capacidad de adherencia.
• Los morteros con bajo contenido de cemento son muy estables a los cambios volumétricos,
pero poseen muy baja adherencia, también son muy absorbentes y por su baja resistencia son
menos durables y rigidizan menos a estructuras como la mampostería de tabique.
• Los morteros con altos contenidos de arena son más económicos y más estables a los cambios
volumétricos, siempre y cuando cumplan con la resistencia deseada.
• La granulometría, textura y forma de los granos de arena son muy importantes en el
comportamiento de los morteros en estado fresco y tienen que ver tanto en el consumo de pasta de cemento como en la resistencia final del producto. Los morteros hechos con arenas bien graduadas y angulosas desarrollan una mejor adherencia y mayor resistencia pero son ásperas y difíciles de trabajar en estado fresco. Las arenas bien graduadas pero redondeadas producen morteros muy trabajables en estado fresco, pero generan menor adhesión y menor resistencia. Las arenas ligeras consumen mucha agua de mezcla, son difíciles de trabajar, generan bajas resistencias, son muy permeables y menos durables, pero son excelentes para lograr superficies antiderrapantes.
• Los morteros que poseen aire introducido son muy trabajables y son más durables al
intemperismo. El aire se introduce por medio de aditivos (líquidos), los cuales durante el mezclado del mortero producen burbujas de aire que quedan atrapadas en el mortero endurecido, las burbujas se alojan en la pasta de cemento. El porcentaje de aire introducido depende de la aplicación, ya que no necesariamente se pone aire para protección contra el intemperismo, también se puede poner aire para producir un material ligero o poroso, el aire introducido puede variar desde un 2% a un 20% en volumen. Si se desea dar una protección contra el intemperismo normalmente se introduce entre un 3 y un 9 % de aire, estos porcentajes disminuyen un poco la resistencia con respecto al mortero que no lleva aditivo, pero esa pérdida se compensa con la protección que proporcionan. Cada aumento en porcentaje de aire disminuye la resistencia a la compresión del mortero, por lo que si no se controla la dosificación del aditivo checando al mismo tiempo la resistencia de la mezcla, se pueden tener muchos problemas. A los morteros con altos contenidos de aire se les conoce también como mezclas celulares (algunos les llaman concretos celulares inapropiadamente puesto que no llevan agregados gruesos), estas mezclas llegan a tener hasta un 30% de aire en volumen y son excelentes materiales aislantes. Como ilustración de la presencia del aire introducido, se presenta la Figura 8.7 en la cual se observan dos fotografías, una de ellas muestra una incipiente formación de burbujas (bajo porcentaje de aire) y la otra presenta una gran cantidad de burbujas alojadas en la pasta del mortero (alto contenido de aire), cabe hacer la aclaración que las mezclas son muy secas, esto se puede observar por la proximidad de las arenas y la poca pasta que las separa.
• Los morteros pueden proporcionarse con la incorporación de una gran variedad de aditivos
(sustancias diferentes al cemento, el agua y la arena) según las propiedades que se requieran de él, ya sea en estado fresco o en estado endurecido. Algunas de las sustancias extras pueden ser la cal, los materiales plásticos y los aditivos empleados en el concreto. A continuación se mencionan algunas de las bondades de estos productos:
La cal se caracteriza por impartir una mayor plasticidad a las mezclas favoreciendo que el agua se retenga en la mezcla y evitando que el mortero pierda humedad al hacer contacto con los tabiques absorbentes, esta cualidad de la cal incorporada al mortero permite una buena hidratación del cemento y disminuye el peligro de obtener morteros de baja resistencia y baja adhesividad.
Los materiales plásticos, entre los que se encuentran las fibras de polipropileno y los polímeros látex son productos que mejoran tremendamente algunas de las propiedades de
los morteros. Las fibras permiten desarrollar una gran resistencia al agrietamiento pues actúan como elementos de refuerzo a tensión, no imparten una ganancia significativa en la resistencia a tensión del mortero, sin embargo ésta se mejora lo suficiente para disminuir notablemente la cantidad de microgrietas que suelen aparecer por contracción de secado o
por cambios volumétricos, en morteros se puede emplear de 1 a 2.5 kg. de fibra por m3de mezcla. Los polímeros látex son sustancias que modifican el comportamiento del cemento aumentando la resistencia a compresión del mortero, la capacidad a flexión, la adherencia y la impermeabilidad, las cantidades de látex pueden variar entre 10 y 25% por peso del cemento.
Figura 8.7. Morteros con Bajo y Alto Contenido de aire Introducido.
Por costumbres prácticas, muchas gentes emplean proporciones sencillas en la elaboración de morteros, la Tabla 8.1 resume algunas de esas prácticas. En la tabla no se indica la cantidad de agua aconsejable en las mezclas, el agua debe ser ajustada en el campo. Para seleccionar la cantidad de agua a emplear en la mezcla debe tomarse en cuenta que al menos se requiere tener un 23% de agua por peso del cemento para garantizar la hidratación, el resto del agua de mezcla estará destinada a facilitar la colocación del mortero. Evidentemente, el alcance de tablas de ayuda como, la presente, es muy limitado ya que como se ha visto los parámetros que influyen en la proporción de los morteros de cemento hidráulico son casi imposibles de prefijar.
Tabla 8.1. Proporciones Empíricas de Morteros Hidráulicos.